Las conexiones inalámbricas son las más utilizadas en nuestros hogares, principalmente debido a su facilidad para conectar dispositivos, en comparación con las conexiones cableadas que no siempre son una opción. No obstante, la principal desventaja de las redes WiFi son los problemas de seguridad que pueden presentar.
De hecho, si no tenemos precaución, podríamos permitir que personas no autorizadas accedan a nuestra red y nos espíen. Por ejemplo, existen programas que pueden facilitar la entrada de terceros a nuestras redes. Estos programas son conocidos como Sniffer.
Usar un sniffer implica utilizar programas o herramientas que pueden capturar información que se transmite a través de una red inalámbrica. De esta forma, si varios dispositivos están conectados a la red WiFi de nuestra casa, un sniffer podría interceptar los paquetes de información que se envían o reciben.
Por ejemplo, gracias a este tipo de software se puede conocer las páginas web que visitamos desde nuestro dispositivo móvil o PC, así como la información que enviamos a través de la red, lo que compromete nuestra privacidad. No obstante, también podemos utilizar esta herramienta de manera positiva para analizar una red WiFi y detectar posibles problemas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que un ciberdelincuente podría utilizar este tipo de herramientas para obtener información de nuestra red inalámbrica.
Por lo tanto, aunque usar un sniffer puede ser útil para mejorar la seguridad de los dispositivos conectados a la red inalámbrica de nuestra casa, un atacante también podría utilizarlo maliciosamente para espiar nuestra red WiFi.
Sin embargo, como mencionamos anteriormente, un sniffer puede ser una herramienta valiosa para monitorear la información de la conexión inalámbrica y detectar problemas de seguridad, como por ejemplo si alguien se conecta a nuestro WiFi con su móvil. Es importante conocer cómo podemos protegernos contra un ataque de sniffer de red.
Cómo proteger nuestra conexión de un ataque sniffer:
Para evitar problemas de seguridad en nuestra red WiFi, una de las mejores soluciones es protegerla adecuadamente. Esto incluye utilizar una contraseña WiFi muy fuerte (que contenga letras mayúsculas y minúsculas, números y símbolos especiales, y sea aleatoria), cifrado WPA-2 o WPA-3 y mantener el router actualizado.
Además de estos pasos básicos, otra opción para aumentar aún más la seguridad de nuestra conexión en casa es utilizar una red privada virtual (VPN). Hay muchas opciones disponibles, tanto gratuitas como de pago, para computadoras y otros dispositivos como smartphones. Al utilizar una VPN, ciframos el contenido que enviamos a través de la red, lo que evita que un sniffer pueda recopilar la información, y si la información es robada, impide que sea leída.