Una escritora descubre libros que no ha redactado en su nombre creados por la inteligencia artificial.
Con la aparición de las inteligencias artificiales, confeccionar un libro no se convierte en una labor excesivamente compleja, puesto que al seleccionar un tópico puedes lograr que las páginas se plasmen ‘mágicamente’ delante de ti. En un principio, esto no plantea inconvenientes para nadie; sin embargo, surge un problema significativo cuando se utiliza el renombrado nombre de un autor para comercializar estos libros que han sido generados con facilidad.
Justamente esto es lo que le ha sucedido a la escritora Jane Friedman, quien se ha topado con la aparición de libros bajo su nombre que no ha redactado. Todos estos textos han sido engendrados mediante inteligencia artificial, lo cual ha resultado ser algo ‘desalentador’ para ella, atribuyendo gran parte de la responsabilidad a Amazon y Goodreads.
La profunda indignación ante el inapropiado aprovechamiento de la inteligencia artificial es evidente.
El problema radica en que estas plataformas carecen, en la actualidad, de sistemas que puedan establecer de manera certera si los libros que cargan concuerdan con el autor que se menciona. Esto implica que cualquier lector puede elaborar un libro mediante IA, alegando ser el autor, y empezar a obtener ganancias de manera expedita. Es precisamente el renombre de la autora lo que incrementa sustancialmente las ventas, ya que genera un nivel de confianza mayor.
Conforme a las declaraciones de la escritora, los libros que ha descubierto en Amazon y que están vinculados a su nombre son los siguientes:
- Un manual progresivo para generar libros digitales atractivos, erigir una plataforma de autor floreciente y optimizar la ganancia.
- De qué manera redactar y lanzar velozmente un libro digital y obtener ingresos.
- Fomentar para triunfar: tácticas para impulsar sus ventas de libros digitales en Amazon.
Así, la escritora está haciendo una denuncia acerca de cómo se están aprovechando de los autores novatos utilizando su nombre para adquirir un libro que creen que es de su autoría, cuando en realidad no lo es. Además, refuerza su postura al señalar que estos libros han sido producidos mediante inteligencia artificial, ya que ha utilizado herramientas de detección avanzadas para corroborarlo. También sostiene la idea de que, debido a la considerable cantidad de su contenido publicado, es factible adiestrar rápidamente a una IA. Sin embargo, en realidad, le bastó con leer unas cuantas páginas de estas obras para percibir que habían sido generadas por ChatGPT.
Y a pesar de sus intentos por encontrar consuelo al afirmar que estos libros carecen de críticas y que están sumidos en un completo anonimato, siente pesar por el hecho de que en la plataforma Goodreads, en efecto, se les atribuye a ella como autora. No resulta sencillo suprimirlos de su perfil, ya que carece de dominio sobre los mismos y debe recurrir a otros usuarios para que denuncien este acontecimiento y logren que sean eliminados.
Debido a todas estas circunstancias, los escritores se ven en la obligación adicional de monitorizar plataformas como Amazon para evitar que contenido falso sea atribuido a su nombre. Sin embargo, esta problemática es de difícil detención, llegando incluso a afirmar que «preferiría ver mis libros siendo objeto de piratería que esto». La verdad es que genera una gran frustración que la IA se esté empleando de esta manera para obtener ganancias de manera veloz, al tiempo que se usurpa la identidad de autores prominentes. Además, sostiene la creencia de que todas las plataformas están mutando en vertederos incendiados al aceptar este tipo de contenido fraudulento.
Hasta el día de hoy, estos libros han sido eliminados de Amazon y Goodreads, lo cual se atribuye a su renombre y a la propagación de sus declaraciones al respecto. Sin embargo, esto posiblemente no ocurra de igual manera para otros autores que estarán expuestos e indefensos en el ciberespacio. Esto hace necesario que las plataformas implementen medidas de control más rigurosas. Esta realidad es algo a lo cual, a partir de ahora, seguramente tendremos que acostumbrarnos.
Fuente: https://www.genbeta.com/